Entre los aztecas, como en la mayoría de culturas, el vestido denotaba la clase social: en las clases bajas, los hombres llevaban un taparrabos (maxtlatl), un manto para el frío y unas sandalias de cuero o agave, mientras que las mujeres llevaban una falda y una camisa hasta las rodillas y sin mangas (huipilli), de algodón o fibra de agave; las clases altas llevaban vestidos de formas semejantes pero de telas más finas o con bordados, entre las que destacaban unos mantos (tilmatli) decorados con los tributos del clan, sudadera barça así como túnicas de mosaicos de plumas y tocados igualmente de plumas.