Ello se denotó por primera vez en Florencia a finales del siglo XV, donde surgió la primera innovación de relevancia: las mujeres dejaron de llevar vestidos largos, que se sustituyeron por dos piezas, falda y corpiño, que podían ser independientes una de otra en cuanto a material y color. Así, en los años 1920 se impuso una estética andrógina de formas planas y rectilíneas, con vestidos cortos de cortes rectos, con cierta inspiración en el cubismo y el art déco, chaqueta fc barcelona los estilos artísticos del momento.